Ecología pondrá marca personal a saqueadores
ZIHUATANEJO; GRO.- Las zonas de arrecifes tanto de playa Las Gatas, como de la isla de Ixtapa, son los que más sufren depredación, principalmente por los visitantes que desconocen que esta acciones es un delito del fuero federal y que los puede llevar a recibir una sanción, dijo en entrevista el directos de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Gustavo Gurrión Maldonado.
Señaló que en esta temporada vacacional, se implementará una estrategia que se espera, pueda impactar de manera positiva a favor de los ecosistemas marinos, y consiste en que los meseros de los restaurantes de estas zonas, estarán al pendiente de que los clientes no hagan el saqueo.
Explicó que se habló con el personal que atiende a los turistas para que informen a los visitantes que sustraer ripios, corales, así como peses y otros seres vivos del mar, es un delito y que por lo tanto está prohibido por lo que se deben abstener de esta práctica.
En caso de que se observe que el turista desobedezca la recomendación, se le va a invitar para que regrese al mar lo que sacó, así sea una concha y se le explicará de nueva cuenta que en los muelles o en las salidas de las playas, hay personal de vigilancia que los puede detener para quitarle el recurso natural.
También habrá sanción para los meseros que permitan esta práctica y no haga las recomendaciones ya que es un convenio de colaboración entre el establecimiento y el gobierno que tienen la única finalidad de evitar el deterioro de las zonas de arrecifes.
Gurrión Maldonado subrayó que de la misma forma se está implementando la supervisión en los muelles para evitar que se introduzcan objetos que en la playa puedan ser agentes contaminantes, al igual como se ha estado haciendo en otras temporadas y muchos de los turistas, que ya han venido en otras ocasiones lo saben.
Por último dijo que se han logrado devolver al mar corales de hasta 3 kilos de peso, son piezas granes que no son fáciles de ocultar, también peces de colores y en una ocasión hasta una anguila que llevaban en una botella de plástico, las que se argumentó, serían un recuerdo de este destino turístico. / VICTOR M. ALVARADO