Eloísa trabaja una jornada intensa para sobrevivir

Atoyac, gro- De sol a sol, Eloísa a sus 64 años de edad, trabaja pepenando basura en el interior del mercado de perseverancia de la mujer para ganarse unos cuantos pesos.

Para ella, el día de las madres es una fecha o un día como cualquier otro que debe dedicarse al trabajo, de lo contrario no saldría para comer, esa es la percepción de Eloísa, una mujer que se gana la vida a diario.

Dijo que esté día de las madres, es igual a los demás, ya que desde las 5:30 de la mañana se levanta, toma una taza de café acompañada de galletas de un día antes y en la oscuridad recorre 2 kilómetros hasta llegar al principal centro de abasto de la ciudad cafetalera donde se sienta a descansar unos minutos para mentalizar el recorrido entre los pasillos del mercado.

La mujer que no cuenta con programas sociales acordé a su edad, dijo que prácticamente su única familia son los locatarios del mercado quienes le dan unas cuantas monedas y otros la invitan a comer.

Dijo que en el mercado dedica de 3 a 4 horas para recorrerlo y sacar la basura, posteriormente se traslada a las calles aledañas y al zócalo de la ciudad donde están instalados comerciantes ambulantes que también generan basura en grandes cantidades.

“Para mí el día de las madres es como cualquier otro, tengo que trabajar para salir adelante porque soy mujer sola y mis hijos viven fuera” dijo la entrevistada quién luego se perdió entre las calles de la ciudad y el ir y venir de las personas. / Marco Antonio Villegas