Masacre de normalistas ha dejado innumerables movilizaciones
ZIHUATANEJO, GRO.- El 2014 fue un año que fue marcado por la masacre de estudiantes de la normal rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa perpetrada por la policía municipal de Iguala, en donde perdieron la vida tres normalistas, dos más resultaron heridos y 43 desaparecidos.
Ello motivó que en este destino turístico profesores egresados de la normal rural y de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero (CETEG), iniciarán una serie de movilizaciones para demandar justicia para los estudiantes asesinados y la aparición con vida de los 43 desaparecidos.
En este municipio las movilizaciones comenzaron el 14 de octubre con una marcha multitudinaria de maestros de la CETEG y de egresados, en la que participaron más de mil personas.
El 16 de ese mismo mes por órdenes del presidente municipal, Eric Fernández Ballesteros, todas las áreas del palacio municipal fueron evacuadas ante la amenaza de que los cetegistas y estudiantes de Ayotzinapa tomarían las instalaciones municipales.
Entre marchas y mítines los manifestantes el movimiento de reclamo para exigir el esclarecimiento de la masacre perpetrada el 26 de septiembre se fue fortaleciendo al sumarse otros sectores de la sociedad como maestros y estudiantes de la Prepa 13, de estudiantes del Instituto Tecnológico de la Costa Grande, organizaciones civiles y la sociedad en general.
El 22 de octubre los cetegistas y la coordinación de egresados de Ayotzinapa efectuaron una marcha más que culminó con la toma del palacio municipal, el cual fue clausurado con cadenas y candados, pero fue devuelto por los egresados, sin el acuerdo de la CETEG.
4 días después se generó el rumor que varios autobuses con estudiantes procedentes de Ayotzinapa y otros contingentes que venían del vecino estado de Michoacán, llegarían a este municipio para llevar a cabo la toma del aeropuerto internacional, como parte de un plan de acción.
Esto movilizó a unos 200 policías estatal que con pertrechos y equipos antimotines acordonaron la entrada principal a esas instalaciones, pero con tan mala suerte que nunca llagaron los alumnos normalistas.
El 29 de octubre nuevamente es tomado el palacio municipal, pero ahora por acuerdo de la CETEG, y apoyado por los egresados, el cual hasta el momento todavía permanece bajo el control de los maestros disidentes.
Cabe destaca que en las marchas han participados docentes de todas las corrientes sindicales, así como jefes educativos; jefes de sector, supervisores, jefes de enseñanza y directores.
El 30 de octubre los manifestantes llevaron a cabo una marcha-mitin en el aeropuerto internacional de manera pacífica y el 5 de noviembre los maestros y organizaciones civiles, estudiantes del Instituto Tecnológico y ciudadanos llevaron a cabo una marcha en la zona hotelera de Ixtapa.
Al día siguiente los egresados y los maestros cetegistas llevaron a cabo la toma de sucursales bancarias, continuaron con más movilizaciones como el bloqueo del boulevard al aeropuerto hasta en cinco ocasiones para continuar con la exigencia que aparezcan los 43 normalistas desaparecidos hace más de tres meses frente al fraccionamiento Fragatas.
El 18 de noviembre un contingente de estudiantes de Ayotzinapa y familiares de los 43 desaparecidos llegaron a bordo de dos autobuses al campamento del ayuntamiento y llevaron a cabo una marcha y una reunión con ciudadanos de este puerto para informar de su lucha.
Luego de innumerables movilizaciones el 10 de diciembre finalmente se conforma el Movimiento Popular Azuetense (MPA), integrada por la CETEG, egresados de Ayotzinapa, estudiantes del ITCG, organizaciones civiles y personas de la sociedad.
Dentro de las primeras acciones ya como movimiento popular el MPA lleva acabo un retén informativo el 17 de diciembre sobre el boulevard al aeropuerto a la altura del fraccionamiento Fragatas.
