Reaccionan en las colonias por el alza de precio en la tortilla
ZIHUATANEJO; GRO.- Ante el incremento al precio por el kilo de tortilla, líderes de colonia alzan la voz y piden a la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), que no se duerma e intervenga, porque son los sectores vulnerables quienes resultan los más afectados.
En común denominador, argumentaron que existe disparidad entre el llamado gasolinazo y el aumento al salario mínimo, el cual no será mayor de 8 pesos, mientras que el incremento a todos los productos de la canasta básica está desfasados y no hay autorización para el aumento ni autoridad que vigile a los comerciantes.
El líder de la colonia Ojo de Agua, Alberto del Valle Rodríguez, dijo que mientras la autoridad no autorice el aumento de los productos de la canasta básica, entre estos las tortillas, no tienen por qué darse el incremento.
Esto pega directamente a las personas más necesitadas y eso no es justo, comentarios que se escuchan por todos lados entre los habitantes esta y otros asentamientos.
El hecho de que hagan aumentado el precio de la gasolina, no significa que todos los empresarios de manera arbitraria tengan que incrementar el precio a sus productos.
Es mentira que a los pobres no le va a afectar el aumento, como lo quisieron hacer creer en la federación, argumentando que son los ricos los que más consumen con sus autos de lujo la gasolina, eso es una mentira, porque a ellos no les pega, puesto que tienen suficiente dinero para pagar el litro al precio que se lo pongan.
El que el salario mínimo no aumenta a la par de los incrementos de la canasta básica y eso, quiera o no el gobierno, si le pega a los desprotegidos.
En el mismo sentido Isaí Hernández landa, representante de la ampliación Buenos Aires, reprochó el incremento a la tortilla, pero al mismo tiempo, reconoció se trata de empresas que también están siendo afectadas porque les aumentaron los insumos.
De una forma u otra los presupuestos cambian en todos los negocios y es por eso que se deben adecuar, pero también deben ser respetuosos y esperar a que las autoridades, les autoricen el aumento a los productos que comercializan o elaboran.
El gobierno no se previno a la reacción del pueblo, y aunque se trate de justificar, desafortunadamente es el pueblo donde se reciente, porque el empresario de alguna manera gana más que los trabajadores y puede soportar el incremento.
Los aumentos debieron ser graduales, por lo que Profeco debe trabajar y estar al pendiente de todos los establecimientos que sin la autorización estén aumentando sus precios.
Hay familias numerosas de hasta 5 o más integrantes, donde se compran hasta 3 kilos de tortillas al día, es decir destinan 60 pesos en este alimento, y el jefe de familia ganando no más de 100 pesos diarios, es un problema delicado e injusto.
Aunque en este puerto los habitantes son pacíficos, es mucho el enfado y no se duda que de un momento a otro, al igual que en otras ciudades, comiencen los saqueos a manera de protesta.
Finalmente remarcó que de manera personal, no ve una solución por parte del gobierno para remediar el problema, no actúa en beneficio de sus gobernados. / Manuel ALVARADO
